ENTREVISTA | TRINIDAD SUAREZ RICO
Responsable del Programa Rompiendo Distancias de Taramundi, San Tirso de Abres y Castropol y Miembro del Grupo de Trabajo del IMSERSO para la difusión de la Red Mundial de Ciudades y Comunidades Amigables con las Personas Mayores
Foto: Nueva España
"El urbanismo inclusivo es aquel que cubre las necesidades y expectativas de toda la población independientemente de su situación personal, nace del conocimiento de la realidad dando respuesta a las necesidades de las personas con el compromiso de mejorar su calidad de vida"
¿Consideras
que estamos experimentando un notable avance en las políticas municipales que
tienen cada vez más presentes aspectos como la perspectiva de género, la
sostenibilidad, la cohesión social o la participación? ¿Crees que contribuyen a
que las ciudades y pueblos sean más humanos y habitables?
En los últimos años ha aumentado la
sensibilidad hacia la creación de espacios más humanizados que pongan en el
centro a la persona y sus necesidades. Las agrupaciones de núcleos de población
creando redes como son las de Ciudades Saludables, Ciudades y Entornos
Amigables con las personas mayores y con
la infancia o el Programa de la Federación Asturiana de Concejos “ Asturias
Compromiso solidario”, son una muestra de las alianzas entre
municipios para conseguir mejorar la calidad de vida de las personas. Son también
un reflejo de escucha activa a los
colectivos de personas que desarrollan su vida en esos entornos. La
Administración local es la administración más cercana a las personas y, por tanto, la corresponsabilidad y complicidad con la
ciudadanía es fundamental en el
desarrollo de sus políticas.
¿Qué es para ti, y desde la
perspectiva de “amigabilidad”, el
urbanismo inclusivo? Nos lo puedes explicar de manera simple para que lo
entienda todo el mundo
El urbanismo inclusivo es aquel que cubre las necesidades y expectativas de
toda la población independientemente de su situación personal, nace del
conocimiento de la realidad dando respuesta a las necesidades de las personas con el compromiso de mejorar su calidad de
vida. El urbanismo inclusivo crea espacios seguros, espacios de socialización para personas de todas las edades y
posibilita que la calle, el barrio, la aldea, sean concebidos como espacios de
convivencia, una prolongación de la casa
y el hogar. El urbanismo inclusivo es respetuoso con la naturaleza promoviendo
un desarrollo sostenible y la movilidad segura de las personas, potenciando la participación comunitaria, las
relaciones de proximidad y la corresponsabilidad
en el diseño de los espacios públicos. Es un urbanismo al servicio de las
personas.
¿Qué nos puedes contar del
interés municipalista por la transformación inclusiva de nuestros pueblos y
ciudades?
Pienso que los municipios están comprometidos
en la transformación inclusiva en la medida que es la vía para humanizar y
mejorar la calidad de vida de las personas
en los pueblos y ciudades. Que todas las personas encuentren respuesta a
sus demandas, que todas las personas puedan acceder a los recursos y servicios,
que los colectivos vecinales y tejido asociativo se sientan escuchados, pasa por la corresponsabilidad y la
participación en la toma de decisiones a la hora de desarrollar las políticas
municipales. Es algo incuestionable.
¿La COVID-19 puede dejar, como
única parte positiva, entornos más amigables?
La COVID -19 nos ha enseñado a valorar el
tiempo y la vida. Ha trastocado de una
forma brutal nuestra escala de valores haciendo que el contacto con nuestros
seres queridos, con la naturaleza, con la vida cotidiana que veníamos
desarrollando antes de la llegada de la pandemia, se haya
vuelto prioritario. Todos los aspectos relacionados con la salud física y
emocional, con el entorno o con una vida
centrada más en los pequeños detalles del día a día - que antes considerábamos
insignificantes – son mucho más valorados. La posibilidad del teletrabajo ha
modificado nuestras necesidades y deseos en relación al lugar en el que queremos vivir
y se ha puesto de manifiesto el gran
valor del medio rural como lugar de
residencia al igual que tener una vivienda con las comodidades necesarias.
Además hemos descubierto nuevas formas
de ocio y de consumo lo que constituye la
oportunidad de dar un giro hacia un enfoque más humanizado y respetuoso con el
medioambiente y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Un entorno amigable garantiza que las personas
mayores puedan envejecer con dignidad y calidad de vida en su
entorno de vida habitual adaptando las políticas municipales a este fin. La Red
Mundial de Ciudades y Entornos Amigables con las Personas Mayores es una iniciativa
promovida por la Organización Mundial de la Salud como respuesta a los cambios
demográficos a nivel mundial debidos al
aumento en el número de personas mayores
de 65 años, que muestran la necesidad de
una revisión en el diseño de pueblos y ciudades. La Red fomenta la
participación y corresponsabilidad de las personas mayores en el diseño de políticas de
acción local incorporando sus propuestas de mejora a través de un proceso de
diagnóstico participativo. El IMSERSO es el responsable en España de coordinar,
difundir y asesorar a las entidades solicitantes en su proceso de adhesión a la
Red.
Uno de los temas que más preocupa a las personas mayores es el de
la soledad. Tú, como trabajadora en constante contacto con personas mayores del
medio rural, ¿cómo percibes este problema en tu entorno?¿Y qué otros temas
crees que preocupan y afecten al bienestar personas mayores?
La soledad no deseada es un problema al que se
ha dado mayor visibilidad en los últimos meses debido a la pandemia, pero sobre
la que ya se venía trabajando y que está relacionada también con la realidad
demográfica actual: altas tasas de envejecimiento, la pérdida de habitantes en
muchos núcleos de población rurales y la deshumanización de la vida en las
ciudades.
Otros temas que preocupan a las personas mayores en el medio rural son la inexistencia y dificultades de acceso a los recursos: falta de transporte público o muy precario, los problemas de accesibilidad , los temas relacionados con la salud y sobre todo la dificultad de no poder envejecer en su entorno de vida habitual por carecer de los apoyos necesarios. La Administración debe de dar respuesta a través del fortalecimiento y ampliación de los servicios de proximidad y de los servicios de ayuda a domicilio. Deben de ampliarse también los recursos de apoyo, formación y conciliación a las familias cuidadoras de personas mayores dependientes y las iniciativas de participación comunitaria y envejecimiento activo. La economía del cuidado puede convertirse en un potente motor de desarrollo y de fijación de población en el medio rural a través de la creación de nuevos yacimientos de empleo.
¿Crees que los entornos en los
que vivimos pueden ser herramientas de
socialización en las intervenciones en contra de la depresión y soledad?
En la medida en que los entornos en los que
vivimos se humanicen, en la medida que se creen redes de solidaridad y se
reconstruya el tejido social, se podrá
luchar contra la depresión y la soledad.
La creación de espacios públicos donde convivan diferentes generaciones
con propuestas de ocio compartido e iniciativas de participación comunitaria
abiertas a toda la población, enriquecerán y mejorarán la calidad de vida
de las personas y podrán minimizar los efectos negativos de la soledad no
deseada.
El pasado 12 de Noviembre, la FACC realizó una Jornada sobre Urbanismo Inclusivo en la que usted participo. Díganos, tres palabras que definan nuestra jornada “Urbanismo Inclusivo, Urbanismos para las personas”
Respeto,
empatía y dignidad.
Gracias.
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